Usos y beneficios de las submodalidades de la PNL

Las submodalidades en la PNL son atributos que se encuentran en cada uno de los sistemas de representación.

En el momento en que nos llega un recuerdo a la mente, comienzan a trabajar ciertos factores que conforman nuestros sistemas de representación de la PNL, también llamados modalidades. Si estás recordando algo que te hizo muy feliz, pondrás en acción algunas cualidades, que pueden ser visuales, auditivas o kinestésicas. Estas cualidades o submodalidades integran cada uno de los sistemas de representación, y son herramientas que pueden ejercitarse y perfeccionarse. Si quieres aprender a hacerlo, ¡sigue leyendo!

Submodalidades: los atributos de tus 5 sentidos

La PNL es un poderoso instrumento que permite reprogramar la estructura del contenido de tu cerebro a través del lenguaje. Una de las técnicas que usa la PNL para esta reprogramación es el análisis de los sistemas de representación o modalidades, que se encargan de procesar la información que recibe nuestro cuerpo a través de los 5 sentidos.

Cada sentido, modalidad o sistema de representación viene compuesto por una serie de características que, al funcionar de forma armoniosa y equilibrada, e incluso en conjunto con otro sistema, crean en la mente un recuerdo originado a raíz del estímulo que viviste en ese instante del pasado. A éstas las llamamos submodalidades.

¿Cómo se clasifican las submodalidades?

Existen 2 formas principales de clasificar las submodalidades de los sistemas de representación de la PNL: de acuerdo al grado de respuesta (analógica o digital) y a su origen sensorial (visual, auditivo o kinestésico).

Submodalidades digitales y analógicas

• La submodalidad digital es aquella en la que la respuesta es concreta, y siempre es afirmativa o negativa. La submodalidad que corresponda a esta categoría ofrece 2 condiciones en las que sólo puede escogerse una. Ya sea blanco/negro, asociación/disociación, todo/nada.
• Por otro lado, la submodalidad analógica describe a toda característica que se mueva a través de una escala o magnitud. Por ejemplo, la luz varía de brillante a oscura, o el agua puede pasar de fría a caliente, pero dentro de esos extremos hay otros niveles, que también corresponden a una respuesta válida.

Submodalidades de acuerdo al origen sensorial

Estas submodalidades a su vez se clasifican en cada el sistema de representación que corresponda, que puede ser visual, auditivo y kinestésico.

• Las submodalidades visuales, que pertenecen al sistema de representación visual, están conformadas por características como brillo, color, distancia, enfoque, tamaño, posición, movimiento, enmarque y asociación (si ves la imagen a través de tus ojos o fuera del cuerpo).
• El volumen, el ritmo y la dirección en la que viene el sonido son tres de las principales características que toma en cuenta nuestro sistema de representación auditivo.
• Las submodalidades kinestésicas se enfocan principalmente en las sensaciones del cuerpo y al sistema de representación kinestésico, por lo que abarcan características como la posición del cuerpo, el peso, la presión y la intensidad (en cuanto a los sentimientos).

¿Qué beneficios trae conocer y ejercitar las submodalidades de la PNL para tu vida?

Ya sabes cuáles son esas submodalidades y sus diferentes clasificaciones, pero ¿para qué utilizar ese conocimiento? Con la ayuda de la comprensión y reorganización de las submodalidades de tus sentidos, es mucho más fácil cambiar conductas negativas y aún más para controlar comportamientos obsesivos, ya que eres capaz de graduar tus estímulos, disminuyendo o aumentando la intensidad de los recuerdos.

También puede ayudar a reducir miedos y fobias progresivamente, siempre y cuando realices los ejercicios constantemente. El hecho de poder regular cada aspecto de tus cinco sentidos te da el poder de dominar tu sentimiento ante el recuerdo, y así, cuando ocurra de nuevo, tendrás las herramientas que necesitas para mantener la calma.

Ejercicios para modificar o aplicar las submodalidades de la PNL

Ejercicio visual

Las submodalidades de la PNL pueden ser ejercitadas en cualquier momento del día en el que puedas concentrarte, así que no pierdas ninguna oportunidad para hacerlo. A continuación, te mostraremos un ejercicio perfecto para el sistema de representación visual que te servirá tanto para estímulos positivos como negativos. En esta caso, lo haremos con una imagen positiva.

1. Recuerda un día en el que estuviste fuera de casa con tus amigos pasándola increíblemente bien.
2. Cierra tus ojos, tómate tu tiempo, intenta concentrarte lo más que puedas en esa imagen y trata de sentir que estás en ese mismo momento de nuevo. La idea es que recuerdes todos aquellos estímulos que te rodeaban: el clima, las risas, las conversaciones, tu estado de ánimo.
3. Una vez que tengas el concepto muy claro, aleja ese recuerdo poco a poco hasta que se convierta en una especie de fotografía frente a ti, y sigue alejándola hasta que se vuelva muy pequeña. Analiza tus sentimientos.
4. Ahora, acerca la imagen de nuevo hacia ti e intégrate de nuevo en la experiencia. Vuelve a analizar tus sentimientos.

Ejercicio auditivo

Este tipo de ejercicio por lo general desencadena un fuertes experiencias emocionales, ya que los sonidos nos llevan a recuerdos instantáneamente. Es mucho más sencillo y es ideal para buscar una sensación positiva.

1. Busca un recuerdo en tu mente que esté íntimamente ligado a un elemento auditivo fuerte y positivo en tu vida. Puede ser la voz de una persona que amas o una canción que te haga sentir con energía y optimismo.
2. Aférrate a ese sonido y concéntrate en los altos y bajos, la intensidad, el volumen, la dulzura de la voz o la melodía de la canción. Repítelo varias veces en tu mente, y si te ayuda acompañarlo con una imagen, ¡mejor todavía!
3. Si te ayuda, puedes fijar ese recuerdo por medio de la técnica de anclaje de a PNL, una herramienta muy práctica y eficaz para cambiar de un estado de ánimo a otro bastante rápido.

Estos dos ejercicios principales también funcionan si los combinas con tu sistema de representación kinestésico, que puede ser un poco más complicado, pero con suficiente práctica puedes lograrlo.

¡Sí, tus modalidades pueden perfeccionarse! Aquí te traemos algunos ejercicios que pueden aplicar según tu tipo de sistema de representación.

Es importante aclarar que estos ejercicios son ideales para las personas cuyo sistema de representación de la PNL dominante sea el que corresponda al ejercicio, sin embargo, las dos actividades traen beneficios para todo tipo de experiencia sensorial. Comunícate con nosotros a través de las redes sociales y cuéntanos que piensas de esta información y si estarías dispuesto a practicarla. Si lo intentas, coméntanos aquí qué te pareció la experiencia. Comparte este blog con tus amigos y aprende más sobre las bondades de la PNL para tu vida.

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