jueves, 6 de julio de 2017

Aprende a controlar tus recuerdos con técnicas de PNL

Esta técnica de PNL que veremos es básica, pero muy poderosa. Después de aprenderla, podrás controlar lo que un recuerdo te hace sentir.



¿Te has preguntado por qué algunos recuerdos evocan en ti sentimientos como la tristeza, felicidad o incluso nerviosismo? ¿Te gustaría aprender a controlar aquellos recuerdos que no te hacen sentir tan bien? Antes de aprender, es importante que entiendas que al recordar un evento, lo haces a través de las representaciones de tus sentidos. Es decir, recuerdas lo que viste, escuchaste, sentiste, oliste y lo que saboreaste. En la programación neurolingüística, estas representaciones de los sentidos se conocen como modalidades, y las tres que nos interesan hoy son las visuales, auditivas y kinestésicas (sensaciones del cuerpo).

Por lo general, siempre hay algo irreal en las imágenes que recreamos en nuestra mente. Afortunadamente, hay muchas técnicas en la PNL que te pueden ayudar a cambiar la forma en que estas representaciones nos hacen sentir. Por ejemplo, si le tienes fobia a los payasos, es posible cambiar la figura del payaso por algún otro personaje que no te cause tanta molestia, como algún dibujo animado. Incluso, algunas técnicas toman este principio para crear tratamientos avanzados.

Actualmente, muchas personas aplican el ejercicio de visualizar al público desnudo para lograr que sea más fácil dar una presentación, exposición o ponencia. Esto se debe a que cambiar el contenido de la memoria, especialmente de forma humorística, puede causar una enorme diferencia en el estado de ánimo del individuo. Como resultado, este logra enfrentarse a sus miedos y seguir adelante con sus objetivos.

Realmente son muchos los ejercicios efectivos que puedes aplicar para controlar los efectos que tus recuerdos tienen sobre ti. Toma nota porque te enseñaré un ejercicio muy sencillo pero súper útil:

Ejercicio kinestésico

  • Paso 1: Trata de visualizar a alguien que realmente te moleste o intimide, y luego imagínate que está delante tuyo. Ahora, en lugar de cambiar los detalles de tu “adversario” vas a cambiar tus propias emociones.
  • Paso 2: Imagina que te vuelves mucho más alto, hasta que la otra persona se vea como un duende o una hormiga. ¿Te sigue intimidando? Empápate de la sensación de sentirte poderoso.
  • Paso 3: Imagina que cuando le hablas, la otra persona se encoge de hombros y empieza a temblar. Siente cómo tu poderosa voz intimida a la otra persona. ¿Cómo te sientes ahora? ¿Te sigue molestando o te sientes más seguro?

Aunque realices este ejercicio pensando en personas molestas, la verdad es que puedes aplicar esta técnica de neurolingüística a cualquier situación que te resulte irritante. Entre más practiques, más fácil te resultará lograr las visualizaciones. Toma en cuenta que algunas personas encuentran más fácil trabajar con una modalidad específica (visual, auditiva, kinestésica) o con alguna de sus combinaciones.

Si quieres conocer más ejercicios que te ayuden a controlar aquellos recuerdos o situaciones que te incomodan, te invito a contactarme. Con gusto, trabajaremos en equipo para lograr buenos resultados. Recuerda seguir mis redes sociales para obtener más información acerca de este tema.

Aunque el cerebro por sí solo no detecta la diferencia entre las situaciones interiores y exteriores, tú puedes conscientemente cambiar las cosas en tu interior.




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